domingo, 22 de marzo de 2020

Catorce años


CATORCE AÑOS

Cogió el primer tren. Sabía que, después de tantos años, estaba por fin preparada.
La mañana de Nochebuena la ciudad había amanecido escarchada y los prados que se veían por las ventanillas lucían blancos por la helada.
Se bajó en el apeadero de su pueblo y subió el camino tapizado de pedruscos y musgo hasta que llegó donde estaba su hijo. Habló con su lápida, le escupió toda su rabia, pero también le dijo que le perdonaba por escaparse aquella noche y estrellarse con la moto contra la puñetera tapia. Y que él también la perdonara.
Lloró todo de golpe.
Después regresó a casa.
Aquella Navidad sería distinta.