miércoles, 4 de mayo de 2022

La vida misma

 LA VIDA MISMA

Cerró su Instagram nada más casarse y nacer la cría y borró todas sus fotos. No dejó ni una. En ellas aparecía siempre en situaciones de lo más temerario y provocador: o estaba haciendo el pino con una mano en el borde de una azotea nevada, o colgada bocabajo de un puente sobre la M30, o saludando con todo el cuerpo fuera de un vagón de metro a punto de entrar en un túnel… En unas lucía un bikini diminuto o un vestido de tirantes, siempre tan mona y glamurosa, y en otras llevaba puesto un abriguito sin nada debajo. Aún le tiembla el cuerpo al recordar las tonterías que hacía, ¡con lo friolera que era y el vértigo que tenía! Pero nada comparado al pánico que siente ahora que su hija de diez años, tan parecida a ella, ha conseguido que su ex le regale un móvil 5G.