sábado, 6 de julio de 2013

La sidra

LA SIDRA

En el fondo, muy en el fondo, se condensaba en un poso de placidez. Solo cuando la agitaban burbujeaba su deseo. Sabiéndose la elegida esperaba, ansiosa, que la aferrara esa mano para elevarla a lo más alto y vaciar todo su ser.

Dedicado  a Jams y a su mujer, María Jesús. En el Sendero del Agua, Cantabria, sidra sin aditivos, mermelada casera y lo mejor y más difícil: personas.